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marzo 12, 2019
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Santo Domingo.- El geólogo Osiris de León sugirió que la pequeña cantidad de agua que queda en los embalses del país hay que administrarla de forma racional debido a la sequía crítica.
De León dijo que es necesario manejar con prudencia el agua disponible debido a que todavía quedan unos 60 días de sequía crítica en República Dominicana.
El asesor del Poder Ejecutivo en Geociencias, Sismicidad y Prevención de Desastres precisa que hay que tratar de que el agua que queda en las lagunas y embalses alcance hasta mediados de mayo, cuando se espera que concluya la sequía.
Refirió que la gran sequía que afecta a las provincias de la línea noroeste y el suroeste estaba prevista.
Agregó que desde agosto, septiembre y octubre del 2018 se produjeron lluvias importantes a causa de fenómenos tradicionales que impactan la región del Caribe.
Y recordó que se advirtió que pasado ese período se produciría una sequía entre noviembre, diciembre de ese año, y enero, febrero, marzo, abril y mayo de este año, por lo que era pertinente ahorrar agua entre agosto y octubre, hasta mayo, mes es que se espera termine la sequía.
Precisa que la pluviometría en el Noroeste, desde Navarrete hasta Montecristi y Dajabón es actualmente de un 25% de lo normal en la región, y en el Suroeste es de apenas un 12% de lo normal.
Explicó que la sequía crítica no se trata de un fenómeno local, sino regional, por el incremento de la temperatura en el océano Pacífico provocado por el fenómeno del Niño Moderado y que está dejando resequedad en las Cuencas del Atlántico y del Caribe.
El asesor gubernamental informó que por el impacto de la falta de agua ya se ha reportado la muerte de por lo menos mil 190 reses.
Sostiene que la sequía es crítica en el suroeste y el noroeste, con el agravante de que se está extendiendo al territorio central.
Eso implica---apuntó—una reducción considerable del caudal de agua de los embalses de las presas de Tavera, Bao, Monción, Rincón, Hatillo, Valdesia, Jiguey, Aguacate, Sabaneta y Sabana Yegua.
Observa que por esta reducción hay menos agua para los acueductos y canales de riego.
Citó que el sistema de agua que abastece el Gran Santo Domingo ha tenido una merma diaria de 51 millones de galones de agua.
Precisa que de 420 millones de galones que entraban diariamente solo se están recibiendo 369 millones de galones, lo que ha obligado al racionamiento del agua en distintos sectores del Distrito Nacional y la provincia Santo Domingo.
Osiris de León subrayó que de acuerdo a las proyecciones, todavía nos quedan unos 60 días de sequía crítica, por lo que insiste en la necesidad de administrar de forma racional la pequeña cantidad de agua que queda en las lagunas y los embalses, fin de que podamos contar con el preciado líquido hasta que termine la sequía, a mediados de mayo próximo.
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